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ASOCIACIÓN DE TAICHÍ TAOÍSTA

La Asociación de Taichí Taoísta es una organización sin ánimo de lucro que cuenta con varias sedes repartidas por la geografía española. Esta ha conseguido hacerse un hueco en la ciudad de Cuenca, donde sus dos profesoras, Francisca y Soledad, imparten clases a personas de todas las edades.

 

La práctica de este ejercicio consiste en la ejecución de una serie de movimientos lentos que se establecen en armonía con el cuerpo, y que busca entablar un equilibrio entre la condición física, mental y espiritual. Se trata, en definitiva, de un tipo de meditación, pero este se realiza en movimiento. Como explica Francisca, consiste en dejarse llevar con todo el cuerpo.

A esta Asociación acuden personas de todo tipo, desde aquellas que buscan una mayor relajación hasta aquellas que aspiran a mejorar sus condiciones sanitarias, independientemente de su religión, gustos o pensamientos; que se trate de una Asociación Taoísta no influye en la forma de impartir las clases.

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Este tipo de taichí tiene su origen en la búsqueda de la imitación de los movimientos de los animales, ya que sus seguidores consideran que estos, al hacer uso de su cuerpo, siguen un ritmo libre y sin forzar los movimientos, como sí hacemos el resto de los humanos. Francisca explica que lo más importante es concentrarse únicamente en tus movimientos y en tu respiración, de manera que consigas ser consciente de tu cuerpo y de tu alrededor.

¿Quieres conocer el interior de la Asociación? ¡Echa un vistazo a la galería de sus instalaciones!

Esta actividad aporta diversos beneficios para la salud: enseña un buen uso de la respiración, mejora la circulación de la sangre, fortalece los músculos, ayuda a prevenir el estrés y fomenta el equilibrio y la coordinación entre el cuerpo y la mente.

 

Tras 17 años enseñando taichí, Francisca recomienda empezar esta práctica cuanto antes, incluso como método para prevenir problemas de salud. La describe como una actividad necesaria para una sociedad como la actual, en la que queremos lograrlo todo lo más rápido posible y en la que no nos paramos a pensar en nosotros mismos. A través del taichí, Francisca ha logrado “salir de ese estancamiento”, e invita a practicar esta actividad a todo el que desee experimentar esta sensación.

Así viven las clases las alumnas de la Asociación...

[Fotografías y vídeos por Sandra González]

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